Sorprendentemente, no todo el mundo quiere escuchar nuestra música, para esto y por muchas otras razones, los auriculares son una necesidad absoluta en nuestra vida diaria
Audífonos de última tecnología
Antes del MP3 e incluso de Spotify, los auriculares tenían poco que ver con la música. Fue en la década de 1880 que los primeros auriculares (o al menos sus antepasados) fueron utilizados por los operadores de teléfono. Era un solo auricular que descansaba en el hombro del usuario y pesaba más de 10 kilos, siendo un peso considerable para ese entonces con el que esas personas tenían que lidiar.
Gracias al sistema de Electrophone, en 1895 la gente podía comenzar a escuchar hasta los latidos de los artistas de la ópera local y desde la comodidad de su propia casa. Los suscriptores al servicio escuchaban a través de auriculares que se parecían más a los estetoscopios que a otra cosa, ya que los cantantes de ópera producían un sonido muy grande en un escenario a kilómetros de distancia.
El origen de los auriculares modernos
Todo esto fue después que Nathaniel Baldwin comenzase a fabricar los primeros auriculares modernos.
Lo más curioso es que los fabricó en su cocina y los vendió a la Marina de los Estados Unidos. Esta fue la primera vez que un par de latas se parecía a algo que verías hoy, aunque Baldwin nunca los patentó. Los DT-48 de Beyerdynamic se convirtieron en los primeros auriculares dinámicos en llegar al mercado y a pesar de que sería unas pocas décadas antes de que los auriculares electrostáticos entrasen en juego, esto fue obviamente, un gran salto adelante en la historia de los auriculares.
Los auriculares dinámicos son, hasta el día de hoy, los más utilizados
Con el diseño en mente, AKG produjo su primer par de auriculares, el K120 y se vendían como pan caliente, ya que este modelo y otros más populares que le siguieron, fueron suficientes para hacer que AKG renunciara al negocio de equipos cinematográficos y se centrara sólo en el audio.
En 1958, Koss creó los primeros auriculares estéreos (Koss SP-3) y todo gracias a la llegada de una nueva tecnología. Durante las próximas décadas, Koss llegaría a dominar la industria de auriculares y lo haría todo sin la necesidad de una molestosa educación universitaria.
Una década después de introducir los primeros auriculares estéreo, Koss desató el primer modelo electrostático fabricado en Estados Unidos, el ESP-6, que costaba por aquel entonces alrededor de unos dos euros, pero todavía estaban muy lejos de los dispositivos que conocemos hoy en día.
Dre y Jimmy Iovine unieron sus fuerzas y junto con Monster, crearon los auriculares Beats by Dre, auriculares diseñados con graves profundos y una gran calidad de sonido en mente (esto es discutible). La línea Beats rápidamente obtuvo una gran cuota de mercado y se podía ver como los utilizaban todos los jugadores de la NBA mientras caminaban desde el autobús al vestuario, algo que hizo que se vendiera rápidamente.